Blogia
Dreamer, el secreto de vivir soñando...

Ilusión...

Ilusión...

Había una vez un campesino gordo y feo
 
que se había enamorado de 
 
una princesa hermosa y rubia...
 
Un día, la princesa

- vaya usted a saber por qué-
 
dio un beso al feo y gordo campesino...
 
y , mágicamente , éste se transformo

en un esbelto y apuesto príncipe.
 
(Por lo menos, así lo veía ella...)
 
(Por lo menos, así se sentía él...)

Jorge Bucay

El amor es la fuerza que mueve el mundo, capaz de hacer bueno lo malo, y malo lo bueno. Capaz de superar los límites físicos y psicológicos humanos, pero sobretodo y antetodo, capaz de dar sentido a la vida.

Juguemos a enamorarnos...

2 comentarios

Carlitos -

Cuánta razón tienes, aunque realmente todos sabemos cuando en ese juego estamos moviendo más fichas de la cuenta, tú lo supiste igual que yo. Realmente sólo discrepo en una cosa, creo que cuando uno es capaz de elegir que no quiere seguir jugando, realmente es un ganador, sin premio momentáneo pero con la enorme posibilidad de poder llegar a jugar a otro juego en el que se sienta partícipe, del que conozca las reglas, con el que se divierta, en el cuál lo esté viviendo tanto que ni siquiera su fin sea el de llegar al final porqué la victoria es poder estar jugando, un nuevo tipo de juego en equipo.

Obviamente tú jugarás otra vez, igual que yo lo haré. Y lo más divertido de este tipo de juegos, es que nunca sabes cuando empieza la partida, y cuando te quieres dar cuenta, estás en medio del juego...

Un beso grande para mi niña favorita!

Rebeca -

Cuando te enamoras la vida pasa a tener otro sentido, otro punto de vista, otro valor de las cosas. No sabemos el porqué, pero defendemos hasta la muerte a nuestra otra mitad en ese momento. Luchamos por demostrar que él o ella es a quien nosotros amamos, con quien queremos pasar el resto de nuestras vidas, la persona que realmente llena aquellos vacios que puedan existir en nuestra persona, pero...este estado de ceguera no dura siempre. Como tu bien dices, el amor nos hace ver buenas las cosas malas, pero a veces estas cosas malas salen a flote, porque en realidad ya existían, ya formaban parte de esa vida en pareja, pero no queriamos darnos cuenta... Hasta que despertamos y vemos lo que hacía tiempo deberíamos haber visto, lo que muchas personas de nuestro alrededor observaban diáriamente e intentaban hacernos ver sin éxito alguno, porque era cosa nuestra, debíamos verlo nosotros mismos, sin el empujón de nadie, aunque de esa forma hubiese sido más rápido tal vez. Pero, a pesar de que muchas veces no salga bien, siempre nos arriesgamos y jugamos a ese crucigrama, pasatiempo o laberinto del amor, porque el juego es así, unas veces se gana y otras se pierde... "lo importante es participar", como dirían nuestros padres al vernos perder un partido de fútbol o quedar terceros en una competición de patinaje. La cuestión es que nosotros siempre nos volvemos a aventurar, por muy decepcionante que haya sido la derrota en nuestra última partida, así que yo jugaré otra vez, espero, y esta vez ojalá pueda ganar sin perder nada, si es que eso es posible...

La experiencia es un grado que nos hace mejores personas y nos proporciona los suficientes criterios para poder mover ficha en un futuro y no caer en la bancarrota...