En soledad...
Anoche no dormí solo, debo reconocerlo, la soledad me abrazó con fuerza nuevamente cubriendo cada parte de mi cuerpo y de mi corazón.
Una vez más te veo alejarte, y tus lágrimas aunque me alegran, me traen más dolor.
La noche es más oscura que nunca y los colores han vuelto a desparecer de la paleta del pintor, el día a día se tiñe de grises y negros esperando el momento en que nuestras miradas vuelvan a encontrarse, y nuevamente el arcoiris vuelva a asomar tras la tormenta.
Apenas hace un par de días que jugamos a adelantar la hora de nuestros relojes, y de repente las agujas parecen haber olvidado la manera de avanzar, el reloj de sol no funciona con la noche y cada segundo parece haber multiplicado su esencia por mil.
Ayer no hubo película con palomitas, no hubo crépes ni besos de chocolate, no hubo abrazos eternos y ni siquiera el jabón olía tan bien. Nuestra cama para dos se ha vuelto a quedar vacía...
Una vez más sé que no sé vivir sin ti.
Te amo princesa...
2 comentarios
Rebeca -
Rebeca -
Te echo muchísimo de menos, tanto que mis días sin ti me hacen enloquecer, queriendo que pasen sin más, rápidamente, y que nos volvamos a encontrar para compartir una película, una crépe o cualquier otra cosa que haga que no nos separemos nunca más.
Tu anillo luce en mi mano como si el brillo de tus ojos lo iluminasen a cada segundo. Te Amo mi vida