Anhelando...

Uno llega un momento, entre tanta soledad, en el que se pregunta qué es aquello que tanto anhela de una relación, o qué es aquello con lo que sueña y que probablemente nunca tuvo, y nunca llegó a experimentar...

Un beso, una caricia, un abrazo en silencio, una mirada de complicidad, una mano que te levante cuando tú solo no eres capaz, alguien que te escuche sintiéndose parte de tu problema, andar agarrados pisando hojas secas, compartir una manta ante la ventana mientras la lluvia inunda el mundo, despertar y que alguien te esté observando, tener la necesidad y obligación de preocuparte por alguién, un regalo inesperado, la sensación de formar parte de algo especial...

Todo esto y mucho más es lo que anhelo, supongo que para mi la vida se mira con cuatro ojos, y el océano es tan inmenso que en él se ahogan mis gritos.